El Devolro Diablo es el resultado de la customización hasta el extremo a la que han sometido al Toyota Tundra los chicos de Devolro. Lo han equipado con todo aquello que pudiera necesitar un coche de estas características, empezando con un motor V8 de 5,7 litros de 505 caballos y una suspensión más elevada para que no se le resista ningún tipo de terreno. Entre los otros componentes destacan los frenos Brembo, un parachoques de alta resistencia y barras de luz LED para que se vea desde cualquier lado.